Saltar al contenido
Vivir con intolerancias

EXPERIENCIA: EL PROCESO DE REINTRODUCCIÓN DE ALIMENTOS

Experiencia: El proceso de reintroducción de alimentos

La retirada temporal de alimentos a los que tu cuerpo reacciona es fundamental, pero más importante es aún realizar un proceso de reintroducción correcto.

De todos los alimentos que he ido introduciendo, tengo que decir que el que recuerdo de forma más “entrañable” es la ternera. Recuerdo perfectamente aquel día, con un trocito minúsculo de filete saboreándolo como si fuera un tesoro y… el pobre de mi marido decirme al momento: “no le he puesto sal”. ¡Pero estaba tan rico! ¡Lo que son las cosas!

El proceso de reintroducción es tan serio, pese al momento simpático anterior, como todo el proceso sin tomarlo. Digamos que hay algunos aspectos a tener en cuenta:

1. Sé paciente y espera a que tu médico te dé las indicaciones de cómo proceder. Las prisas no sirven de nada y no respetar los tiempos puede hacer que no se elimine la intolerancia.

2. Sé estricto. Si te dicen una cantidad concreta a tomar cada semana, cúmplelo, lo agradecerás. Cumple las cantidades y los tiempos indicados.

3. No mezcles alimentos en procesos de reintroducción. Sé que estarás deseando volver a comerlos todos, pero es mejor ir uno a uno, lentamente, e ir comprobando cómo va reaccionando y respondiendo tu organismo a ese alimento.

4. Si recaes en procesos inflamatorios o de enfermedad… ESPERA. La paciencia ante todo. Si estás en un proceso de salud que te pueda generar dudas con respecto a si el alimento te puede estar haciendo daño, es mejor esperar. Da igual unas semanas más que menos, piensa que ya llevabas meses o incluso años sin tomarlo.

5. Comenta cualquier síntoma o reacción con tu médico: en ocasiones puede que tenga relación un síntoma con una introducción de alimento, pero en otras no. Si tienes dudas sobre si debes continuar con la reintroducción, plantéaselo al facultativo que lleve tu caso.

6. “En el medio está la virtud”. Con ello queremos señalar la importancia de poner “cabeza”, es decir, una vez reintroducido el alimento sé creativo con tu dieta y tu alimentación, trata de no abusar, y variar los alimentos todo lo que puedas, para que tu organismo respire. De esta manera, reducirás las probabilidades de que vuelvan a aparecer las intolerancias rápidamente.

7. Sé consciente de que siempre podrán volver. Ahora ya sabes que esto te acompañará en tu vida y que debes escuchar tu cuerpo para saber qué hacer en cada momento. Habrás pasado por tantas dificultades que sabrás “sobrevivir” mejor y solucionar los problemas que vengan.

8. Por último, DISFRUTA, con cabeza pero disfruta. Después de mucho tiempo volverás a tomar muchas cosas que antes tenías prohibidas, por lo que aprovecha el momento, saboréalo y no pienses en nada más. Si vienen problemas más adelante, ya se buscará la solución.

ATENCIÓN: Este proceso de reintroducción de alimentos de los que hablamos, nunca contempla la enfermedad celíaca, ya que la alimentación sin gluten en personas con celiaquía es vital y para toda la vida. Cuando hablamos de reintroducción de alimentos a los que se tiene intolerancia, siempre es con respecto a otros alimentos positivos en analítica y negativizados posteriormente en las sucesivas. Por último, siempre se realizará bajo estricto control médico y siguiendo sus indicaciones.