Saltar al contenido
Con intolerancias

MINI BIZCOCHOS DE NARANJA (O MAGDALENAS)

 

Mini Bizcochos de naranja o (magdalenas)

Nuestra amiga Aída (con la cual comparto bastantes intolerancias) cogió un día un panfleto en un supermercado con una receta. Cuando la miró con tranquilidad vio que podíamos usarla, ya que era sin gluten, sin lácteos y sin huevo. ¿Mini bizcochos sin estos tres elementos? ¡Había que probarlo! Y así hicimos en una jornada de cocina entre las dos:

Ingredientes:

– 4 gr de psyllium (zaragozana o plantar novata, son otros posibles nombres).
– 160 gr harina de maíz Atlantic.
– 40 gr de almidón de maíz (utilizamos Maicena).
– 20 gr de levadura.
– 12 gr de semillas de lino.
– 120 gr de azúcar integral de caña.
– 30 gr de sirope de ágave.
– 200 gr de zumo de naranja.
– 200 gr de bebida vegetal (nosotros usamos leche de arroz calcio de Provamel).
– 40 gr de aceite de oliva.
– Ralladura de naranja.
– Una pizca de canela.

Mezclar las harinas con la levadura, las semillas de lino, el azúcar y la canela.

En otro recipiente, mezclar el zumo de naranja, la bebida vegetal y el psyllium. Pasar por la batidora y dejar reposar 5 minutos.

Incorporar la preparación en los ingredientes secos, mezclando bien hasta que no haya grumos. Para ello, utilizamos nuestro robot Clatronic (KM 3414 Clatronic polvo eismaxx y Wolf carne, Plata). Añadir el jarabe de ágave, el aceite y la ralladura de naranja. Reposar la mezcla unos 10-15 minutos antes de hornear.

Debido a que la masa queda muy líquida, nos ayudamos de una manga tipo pastelera. No os asustéis, dejando algo más de tiempo en el horno se cuecen bien.

Hornear en molde de magdalenas (Lacor 66745 – Set de 12 moldes para muffins, silicona ) (debido al tipo de masa que es), unos 40 minutos a 175º C y dejar secar dentro del horno unos 5-10 minutos extras. Comprobar pinchando con un palillo, y si sale seco, está bien cocido.

Aunque intentaremos mejorar algo más esta receta, sobre todo por lo líquida que resulta inicialmente la masa, preferimos compartirla ya que se devoran en un santiamén y el sabor es maravilloso.
¡Que aproveche!